Hoy vamos a adentrarnos en las nuevas formas con las que el consumidor entra en contacto con las marcas a través de la experiencia digital.
Es una experiencia digital de navegación, búsqueda, selección, comparación y finalmente (en el caso más positivo) compra. Ya no estamos hablando sólo de conseguir Notoriedad, Atención y Consideración, sino que es un proceso mucho más complejo en el que hay implicados no sólo marcas y consumidores sino también grandes portales de venta, buscadores con sus propias recomendaciones y ofertas y Redes Sociales con sus “influencers” y tiendas.
Las reviews de producto
Además de todo lo anterior tenemos un nuevo punto, o no tan nuevo pero que cobra cada vez mayor importancia para la conversión final en ventas, que son “las reviews” de producto y su efecto cada vez más importante, en positivo o en negativo, en las decisiones de compra de los consumidores.
Y ante todo esto…
¿Qué pueden hacer las marcas?
Pues lo fundamental es mantener un discurso coherente en que sus palabras, comunicación y publicidad, se mantengan perfectamente alineadas e integradas con sus actos: marca comprometida con su entorno, marca socialmente responsable, marca con productos útiles y valiosos, marca que trata correctamente a sus empleados, colaboradores y proveedores, marca que cumple con sus obligaciones fiscales en los países donde se generan sus ventas y beneficios, etc…
Estamos ante los consumidores más implicados e informados de la historia y esto conlleva ventajas para las buenas marcas e inconvenientes para las marcas que tienen problemas de coherencia o de consistencia entre lo que dicen y lo que hacen.
Comunicación de las marcas
Desde el punto de vista de la comunicación, sea en el medio y soporte que sea, la historia tiene que ser creíble, tiene que llegar al corazón del consumidor y le tiene que ofrecer soluciones a sus necesidades. El “storytelling” y el storydoing” se deben dar la mano y todo debe confluir armónicamente para que no chirríe en la mente del consumidor.
De esta manera nos podemos convertir en relevantes y quizás incluso podremos tener mejores resultados invirtiendo menos en comunicación ya que los propios consumidores dinamizarán nuestros mensajes. En el mejor de los casos podemos llegar a tener verdaderos embajadores de la marca.
Vemos que, con mayor o menor éxito, con mayor o menor fortuna muchas marcas: Estrella Damm, Casa Tarradellas… crean verdaderas historias, incluso en tv, que siguen año tras año con el eje común de dar soluciones y continuidad a la comunicación.
La propuesta de valor es clara ofrecer coherencia y consistencia entre la comunicación y nuestros actos. La comunicación debe dar soluciones y llegar al corazón, pero transmitiendo realidad.
Para esto lo ideal es la integración total del trabajo bajo el paraguas de la Estrategia con desarrollos creativos y de medios que respondan inequívocamente a esta estrategia marcada y sean un reflejo de la verdadera alma de la marca.